Seguidores

jueves, 24 de marzo de 2011

Un millón de sueños

Alguien me dijo una vez
“aún no ha llegado mi tren”.
Supe entenderle después,
quedaba tanto que hacer…

Él nunca más podrá subir a un árbol.
No, no podrá jamás mirar tus ojos.
No podrá descubrir el universo
que hay entre tus besos,
tumbado en tu pecho,
ni un millón de sueños
que aún quedaron por soñar.

Un triste día se fue,
nada pudimos hacer.
Sólo le pido al gran juez
nunca olvidar esa tez.

Él nunca más podrá subir a un árbol.
No, no podrá jamás mirar tus ojos.
No podrá descubrir el universo
que hay entre tus besos,
tumbado en tu pecho,
ni un millón de sueños
que aún quedaron por soñar.

Él nunca más podrá subir a un árbol.
No, no podrá jamás mirar tus ojos.
No podrá descubrir el universo
que hay entre tus besos,
tumbado en tu pecho,
ni un millón de sueños
que aún quedaron por soñar.

No, nunca más podrá subir a un árbol.
No, no podrá jamás mirar tus ojos.
No podrá descubrir el universo
que hay entre tus besos,
tumbado en tu pecho,
ni un millón de sueños
que aún quedaron por soñar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario